Actualmente existen conexiones entre casi todas los lugares del mundo y los viajes forman parte de nuestro día a día. Por esta razón es fundamental que estas conexiones sean seguras, gracias al mantenimiento de carreteras, para que cuando vayamos al volante el estado de la carretera no suponga una distracción para nosotros.
El paso del tiempo, las adversidades atmosféricas, el peso de los vehículos y algunos factores más son los que influyen en el deterioro de las carreteras. Este deterioro presenta diferentes etapas, de las cuales van desde una etapa inicial en la que el desgaste es lento y casi imperceptible, hasta llegar a una etapa crítica en la que el uso de la infraestructura es poco viable y hace necesaria una rehabilitación total.
¿Cómo afecta esto a la seguridad vial?
Un camino o carretera en mal estado constituye un gran peligro para los conductores. Según un reciente estudio de la Asociación Española de la Carretera (AEC) hasta un 94% de los accidentes de tráfico producidos por culpa de la vía son debidos al mal estado de la misma.
El deterioro del asfalto provoca una menor adherencia de los vehículos, lo que implica un aumento de la distancia de frenado. Además los baches y la mala señalización no sólo provocan accidentes, sino también el deterioro de nuestro coche.
Por esta razón las acciones de mantenimiento de las carreteras es muy importante para las seguridad de todos.
El medio ambiente también se ve afectado:
No mantener correctamente las carreteras también provoca consecuencias en el medio ambiente.
Si las carreteras están en mal estado, el consumo de combustible de los vehículos aumenta (junto con lo que esto conlleva) y el ruido ambiental por la fricción producida entre el asfalto y los neumáticos también.
Otro riesgo más son las emisiones de gases de efecto invernadero. La Asociación Española de Fabricantes de Mezclas Asfálticas (Asefma) defiende la necesidad de adaptar las carreteras para hacerlas más “sostenibles y amigables con el medio ambiente, innovadoras, inteligentes y seguras“.
¿Qué tipos de mantenimiento de carreteras existen?
De forma general podemos diferenciar tres tipos de conservación de carreteras:
-Conservación rutinaria de tramos y puentes, que básicamente consiste en la limpieza de la carretera, reparación de pequeños defectos en la superficie de rodadura, mantenimiento de los sistemas de drenaje y control de la vegetación.
-Conservación periódica, que implica el restablecimiento de las características iniciales de rodadura (mezcla asfáltica y pavimento), reparación general de la obra y de los sistemas de drenaje y control de la vegetación.
-Señalización, que consiste en la revisión y mejora de la misma.
En MESASOL ejecutamos de manera eficiente todos los proyectos de carreteras, caminos y otras obras. La seguridad de todos es nuestra prioridad. Si quieres conocer nuestros proyectos visita nuestra web.